Transportes de embarcaciones a otros paises: una "maniobra" que no hay que subestimar

Presentamos las nuevas reglas que se imponen a los expertos en el transporte de embarcaciones

Una empresa dedicada al transporte de embarcaciones que pueda considerarse cualificada debe tener la capacidad de ganarse la máxima confianza de quienes se ponen en manos de los transportistas marítimos. Esto, antes de cualquier otra consideración. No basta, en efecto, que la plantilla sea muy profesional: también es conveniente que la empresa de transporte por mar tenga la capacidad de mover barcos y otros vehículos directamente entre dos países extranjeros.

Esta maniobra permite a una empresa de transporte de embarcaciones imponerse y distinguirse por su excelencia y seriedad también en el mercado extranjero. El rápido crecimiento del volumen de los intercambios internacionales en nuestros días impone a las empresas más grandes dedicadas al transporte de embarcaciones el desarrollo de capacidades especiales. Entre estas, la primera es el poder mover mercancías directamente entre dos países extranjeros, sin necesidad etapa intermedia en Italia. Internacionalmente conocido como cross trading, este servicio requiere sacrificio, grandes inversiones y una colaboración intensa con una densa red de agentes en el exterior.

Pero, ¿en qué consiste exactamente este servicio de transporte de embarcaciones entre dos países extranjeros? ¿Y qué aspectos debe contemplar el servicio para poderse definir como completo y profesional? Trataremos de dar alguna respuesta útil a estos interrogantes.

Puntualidad y fiabilidad: el resultado de contar con alianzas válidas.

El transporte internacional de embarcaciones es una operación particularmente ardua que, para poder abordarse debidamente, requiere de alianzas rentables y muy seleccionadas.
Con la finalidad de poder asegurar una extensa red de cobertura para los desplazamientos internacionales, es bueno contar con referentes fiables. Y que esto ocurra en todo el territorio de competencia en donde tendrá lugar el desplazamiento.  Estas relaciones se basan en sólidos acuerdos que apuntan a reglamentar la disponibilidad del espacio, la puntualidad y la fiabilidad del servicio en cada ruta. No se puede ni se debe descuidar ninguna fase del proceso de transporte de embarcaciones.

Gestión de todos los trámites en relación con un transporte en toda regla. 

Los transportes de embarcaciones contemplan, como etapa obligatoria, por parte de quien se ocupa de realizarlos, la gestión de los necesarios trámites de aduana y burocráticos que van de la consolidación al almacenamiento, pasando por la organización, en su caso, de servicios especiales. El personal encargado de estos servicios, en absoluto sencillos cuando se trata de transportes entre dos países extranjeros, debe seleccionarse con atención. Es conveniente comprobar que el equipo dedicado cuide todas las fases del procedimiento, desde la gestión de los trámites preparatorios para el transporte de embarcaciones, hasta la liberación del barco en el lugar de destino.

Anticipar operaciones, optimizando cada plazo de tiempo empleado, permite adelantar todas las posibles problemáticas que pudieran surgir durante el transporte entre dos países extranjeros. 

Con ese fin, es extremadamente útil efectuar con regularidad las operaciones previas al despacho aduanero de barcos y yates asignados a transportistas. En ocasiones se lleva a cabo el despacho aduanero incluso antes de que la nave llegue a destino, optimizando de ese modo los tiempos muertos. En eso consiste la diferencia entre unos servicios de transporte de embarcaciones rápidos y puntuales y los que no lo son. Procediendo de ese modo se evitan además retrasos causados por aduanas congestionadas y se reduce la duración total del tránsito. La embarcación a transportar está así ya lista para la entrega antes de su llegada a puerto.

Precisión y puntualidad de entrega de los envíos  

Para garantizar un servicio preciso y puntual, también a nivel internacional, los profesionales del sector de los transportes internacionales de embarcaciones deben contar, como hemos dicho, con una buena confluencia de sus arterias de producción. Para desplazar de un país a otro, en el extranjero, medios marítimos sin límites de peso y de dimensiones, es necesario planificar todo el transporte de manera perfecta. Para hacerlo, es necesario apoyarse en un bagaje técnico bien consolidado que apunte a garantizar una asistencia total en todas las fases del proceso, desde la fase del despacho de aduana.
Los transportes de embarcaciones deben ser rápidos, seguros y eficientes, también y sobre todo en caso de que se realicen por vía aérea. Ningún profesional que pueda considerarse digno de tal nombre puede cometer errores, ya que los embarques, desembarques y operaciones de aduana, en nuestros tiempos son actividades al orden del día.

Todas las operaciones hasta aquí descritas deben, por último, realizarse teniendo en cuenta todas las medidas necesarias para garantizar la seguridad en los transportes de embarcaciones. Es evidente que este tipo de protección no puede considerarse secundario, ya que representa un deber en todas las actividades de transporte por mar. Pero eso es otra historia, sobre la que profundizaremos más adelante.