Las 4 reglas basicas para un transporte de yates en barco en toda regla

Cómo debe llevarse a cabo el transporte marítimo de los elegantes y valiosos yates, barcos de ensueño.

 

El transporte de yates en barco o con otros medios no es un trabajo sencillo.

Las operaciones que comporta (pensemos, por ejemplo, en lo que implica el transporte de los barcos por mar) requieren no poco esfuerzo. Por ello, es necesario que las empresas de transporte dedicadas a esta tarea sean auténticas expertas. No hay espacio para improvisaciones en operaciones tan delicadas.

En el caso específico, por ejemplo, del transporte de yates o de barcos de lujo, en general, un simple descuido o la más pequeña distracción podrían causar daños de miles de euros.La pregunta es cómo llevar a cabo, en términos prácticos, el transporte de naves tan delicadas y valiosas. Olvidemos el clásico y simple transporte sobre un carro: en estos casos lo que se requiere es un barco, y un barco de buen tamaño. Teniendo esto en cuenta, descubramos las reglas básicas para un transporte de yates en barco en toda regla.

 

1. Conocer y respetar la normativa en materia de transporte de yates

Quien posee una embarcación de lujo intuye fácilmente que el transporte de un yate en barco no es una operación que pueda considerarse precisamente simple. Quien disfruta del uso de un tipo de embarcación tan especial, sabe bien que no siempre es fácil hacer ensayos previos de transporte, debido al tamaño y al tonelaje. Por ello, es importante conocer bien la normativa que regula este tipo de transportes.

Comencemos con las autorizaciones: el transporte de embarcaciones de tamaño excepcional (se consideran excepcionales aquellas de más de 3m de manga y más de 25m de eslora) recae en la categoría de transportes excepcionales, cuya normativa es la contemplada en los artículos 10, 61 y 62 del Código de Circulación. Por tanto, quien disponga de naves de estas características, debe ser consciente, antes de ponerse en manos de una sociedad para transporte de yates por barco, de las peculiaridades del servicio en cuestión.

 

2. Elección de una empresa que cuente con la documentación adecuada

Para poder circular, los transportes especiales deben contar con un documento de autorización adecuado. El documento debe acompañar al vehículo durante todo el viaje, incluido el regreso, en su caso. Por ello, es necesario que la empresa elegida para el transporte de yates en barco esté dotada de la documentación necesaria para efectuar el desplazamiento. De no ser así, el desplazamiento de este tipo de embarcaciones no sería conforme a la ley.

 

3. Elección del recorrido: una fase que no hay que subestimar 

Además de contar con toda una serie de autorizaciones y con la documentación correspondiente, la sociedad a la que se tiene intención de asignar el servicio de transporte de yates en nave, debe poseer unas capacidades y una experiencia auténticas. La sociedad de transportes en cuestión debe estar capacitada para encontrar la mejor ruta para el transporte de vehículos excepcionales, tras evaluar toda una serie de variables. Entre ellas: las dimensiones de la carga, las condiciones de la carretera y la presencia de obras en curso en determinados tramos del trayecto.

 

4. Asignamos el transporte a una empresa autorizada y bien equipada

La sociedad a la que se asigne el servicio de transporte de yates en barco, debe contar con todos los permisos de tránsito emitidos por las autoridades competentes. Se trata de un detalle de máxima importancia, que no se debe descuidar bajo ningún concepto: las autoridades competentes conceden el permiso únicamente a las empresas que tienen la experiencia, la documentación y el equipamiento necesarios para llevar a cabo el servicio en toda regla. La sociedad a la que se tenga intención de asignar el servicio de transporte de yates en barco debe poseer además capacidades suficientes como para organizar la escolta técnica.

Por último, y ciertamente no en orden de importancia, debe contar con todas las herramientas necesarias para levantar, enganchar y desenganchar el yate, a fin de llevar a cabo correctamente las operaciones de carga y descarga. Esa es la razón por la que hay que buscar una empresa que haya demostrado, a lo largo de los años, saber gestionar con éxito los transportes internacionales por mar de toda clase de medios, sin límites de tipo, peso y medidas.

Por ello, la conclusión es no subestimar la elección de la sociedad a la que se asigna el servicio de transporte de yates en barco. Es mejor decantarse por quien cuente con un bagaje técnico comprobado y que pueda ofrecer una asistencia completa en todas las fases del proceso, además de una distribución estratégica sólida y capilar de sus hub internacionales.


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